La dosis fue repartida solamente a 300 personas y debido al malestar de los pacientes, los médicos debieron repartir 400 turnos para la próxima semana.
El aumento de los casos de fiebre amarilla en Brasil encendió el alerta entre los turistas. Este sábado hubo cerca de mil personas en las puertas del Hospital Posadas, en El Palomar, esperando recibir una de las 300 dosis que se daban.
Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendaron que se inmunicen 10 días antes del viaje y solamente las personas que vayan a los estados de Río de Janeiro, Bahía, Acre, Espíritu Santo y Sao Pablo, y a las Cataratas del Iguazú.
El escaso abastecimiento de los centros médicos del país generó malestar entre los viajeros, que debieron deambular de un espacio de salud a otro en busca de la inyección.