El procedimiento tuvo lugar a la altura del kilómetro 1,7, como parte de los controles preventivos por ilícitos y faltas generales realizados por personal de la División de Seguridad Vial Buen Ayre I, en coordinación con la Superintendencia de Seguridad Vial Zona Norte.
Durante la inspección, los agentes interceptaron un Citroën C3 gris y, al solicitar la documentación al conductor, este mostró nerviosismo y ofreció respuestas contradictorias. El sujeto, identificado como A.P., no poseía documentación personal y presentó una cédula del vehículo a nombre de un tercero.
Ante las inconsistencias, y con la presencia de testigos hábiles, se procedió a revisar el interior del rodado, hallando en el baúl seis envoltorios. Cinco de ellos contenían 3,379 kilos de picadura de marihuana, mientras que el restante contenía 1,005 kilos de clorhidrato de cocaína. Las pruebas de campo confirmaron la presencia de ambas sustancias.
También se incautaron un teléfono celular y el vehículo utilizado para el transporte. El imputado no registraba antecedentes ni impedimentos legales vigentes, según confirmaron las bases de datos oficiales.
La causa quedó a cargo del Juzgado Federal de Tres de Febrero, bajo la intervención del Dr. Juan Manuel Culotta y la Secretaría N.º 9 a cargo del Dr. Gabriel Ruedas. El magistrado dispuso la aprehensión del sospechoso y la realización de los recaudos legales de rigor.
La investigación continúa abierta, y no se descarta que el detenido forme parte de una red dedicada al narcotráfico interurbano.